Adrián y Wilson, del colectivo de apoyo a migrantes, fueron asesinados a balazos en este municipio la tarde del domingo, informaron hoy defensores de derechos humanos que brindaban ayuda humanitaria a centroamericanos en su paso por México, y denunciaron la presencia del crimen organizado que opera en la zona.
El corredor de migrantes Lechería-Huehuetoca-Apaxco-Tequixquiac-Bojay, es considerado «el paso de la muerte», luego de múltiples agresiones, secuestros, robos a centroamericanos y el homicidio de los dos voluntarios que fueron acribillados el 23 de noviembre, luego de dar de comer a migrantes en la zona del basurero de Tequixquiac, relató Andrea González del colectivo «Ustedes Somos Nosotros».
Los defensores de los derechos humanos de los migrantes fueron baleados en el interior de su auto, por agresores que huyeron la tarde del domingo en este municipio de Tequixquic.
Wilson y Adrián, lograron detener una agresión y robo de un grupo de maras contra migrantes en febrero de este año, en la misma zona de los basureros, que se ha convertido en una parada de centroamericanos, asalto en el que lograron detener a los delincuentes.
Incluso Wilson fungió como testigo contra los maras en la Subprocuraduría Especializada en Atención a Delincuencia Organizada (Seido) y hace apenas 20 días recibió visa humanitaria por tal razón.
Andrea González indicó que luego de la detención de los maras, los dos voluntarios sufrieron hostigamiento y amenazas, por lo que disminuyeron sus actividades de atención a los migrantes y recién se volvieron a incorporar cuando fueron acribillados por desconocidos.
Jorge Andrade, también de «Ustedes Somos Nosotros», señaló que el crimen organizado opera en el corredor que va de Lechería, en Tultitlán, a Huehuetoca, Tequixquiac y Apaxco, en el estado de México, así como Bojay, Atitalaquia, Hidalgo.
«Ustedes Somos Nosotros» no dio a conocer los apellidos de Adrian y Wilson, de 39 y 29 años de edad, como medida de protección de sus familiares, toda vez que en esta agresión participaron integrantes de la delincuencia organizada que opera en el mencionado corredor, indicó Andrade.
El padre Pedro Pantoja, de la Casa del Migrante Belén, en Saltillo, Coahuila, mencionó que el corredor Lecheria-Bojay es un «territorio del terror», que «reproduce el modelo de un México que es un cañaveral en llamas, sembrado de asesinatos, desaparecidos y secuestrados».
Aquí «el crimen organizado actúa coludido con policías y agentes del Ministerio Público; no es un acontecimiento aislado, es un escenario de muerte», aseveró el clérigo.
Mientras que Adrián fue sepultado en Tequixquiac, municipio ubicado al norte del Estado de México en la zona limítrofe con Hidalgo, el cuerpo de Wilson aún permanece en el servicio médico forense de Zumpango, en espera de que alguna autoridad del consulado de Honduras promueva su traslado a este país centroamericano.
FUENTE:EL UNIVERSAL
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